Varios simpatizantes de la CUP y algunos vecinos de la zona, han vandalizado con empapelar las marquesinas y plastificar con plástico los accesos a los autobuses que operan TCC.
Aseguran que con la puesta en marcha de este servicio, se atrae la masificación turística que mata los barrios más afectados por el turismo y invitan a los usuarios, que no utilicen este servicio y vayan caminando o usando la línea V19.
También, se ha mencionado que se gestione una empresa integrante del grupo Moventis y pedían entre otras, la supresión de cualquier servicio que se gestione en Barcelona ciudad, por una empresa privada o de la disolución de Bus Nou Barris.
Este servicio, no está exento de polémica. Desde sus inicios, los vecinos del Baix Guinardó han pedido siempre la retirada de este servicio y se potencie servicios en líneas regulares de TMB como las V19, 191 y la regresión de la línea 92, actualmente desaparecida por la ultima fase de la Nova Xarxa de Bus.
